El Síndrome de Fatiga Crónica o encefalomielitis Miálgica pos vírica es una enfermedad neurológica compleja y debilitante que se caracteriza por una fatiga física intensa y mental que no remite tras el reposo, y que empeora con otros síntomas. El SFC no sólo afecta al Sistema Nervioso Central y Autónomo, sino también al Sistema Nervioso Periférico.
En la actualidad se sabe que en el SFC el desencadenante de la enfermedad puede ser una infección vírica, bacteriana o tóxica que ponen en marcha una serie de alteraciones inmunológicas con liberación de sustancias llamadas cito quinas que causan la sintomatología de la enfermedad.
El SFC, al igual que la Fibromialgia es una enfermedad multisistémica que hace que afecte a muchas partes del organismo, compartiendo con la Fibromialgia síntomas que a veces pueden confundir el diagnóstico. Fibromialgia y SFC son dos entidades diferenciadas y su diagnóstico y tratamiento también deben serlo.
En el SFC igualmente existe el dolor, pero el síntoma predominante es la fatiga profunda y el cansancio importante que no cede con el reposo y que, según el frado de afectación del paciente, puede llevar al enfermo a una situación de agudización transitoria hasta el punto de no poderse mover de la cama y precisar ayuda para las actividades de la vida diaria (AVD). Además el SFC se acompaña de febrícula, no más de 38º, dolor de garganta, faringitis persistentes, afonías, dificultad para tragar, sensibilidad dolorosa en los ganglios linfáticos, migrañas, sueño no reparador, disminución importante de la memoria, arritmias cardiacas, taquicardias, mareos, bajadas bruscas de tensión, síncopes cortos taticos, etc.
El SFC es una enfermedad también de reciente identificación y, aunque en esta enfermedad sí existen pruebas que evidencian la patología, son pruebas especiales y complicadas como son una batería de marcadores virales y bacterianos, así como exploraciones de SPECT (escáneres cerebrales y RM, resonancia magnética).